Greissy Ortega pide a Dios que no deporten a Ítalo Villaseca a Perú: "No tendré paz"

La modelo colombiana Greissy Ortega ha expresado una profunda preocupación por la posibilidad de que su aún esposo, Ítalo Villaseca, sea deportado de Estados Unidos a Perú. La situación se complica debido a las estrictas medidas del gobierno estadounidense contra los inmigrantes indocumentados, lo que ha puesto a Greissy en una posición incómoda y llena de temores.

Según ella, la deportación de Ítalo no solo afectaría su estabilidad emocional, sino también la tranquilidad de sus hijos y su vida en general.

Preocupación por la llegada de Ítalo Villaseca a Perú

Greissy Ortega decidió regresar a Perú para estar cerca de sus hijos y asegurar su bienestar, lejos de las complicaciones legales y emocionales que surgieron en Estados Unidos. En una reciente entrevista, la hermana de Milena Zárate reveló su miedo a que la llegada de su esposo, si finalmente es deportado, interfiera con la paz que ha logrado reconstruir en su vida. "Solo pido a Dios que no lo manden para acá porque no podré vivir en paz", declaró Greissy con visible angustia.

La colombiana detalló que esta preocupación tiene su origen en la situación legal de Ítalo, quien, según sus palabras, ya tiene una orden de deportación desde el año 2022, además de varias denuncias por agresión que ella misma presentó en California y Nueva York. Greissy recordó que su esposo tiene un historial complicado que incluye acusaciones de violencia que complican aún más su posible regreso al país.

Un cambio de vida y una postura firme

La modelo también aprovechó la ocasión para aclarar que su vida ha cambiado significativamente desde que decidió regresar a Perú. En su país natal, ha encontrado una nueva paz y un equilibrio emocional que antes le era difícil alcanzar en Estados Unidos. Greissy afirmó con determinación que ya no es la misma persona vulnerable que solía ser en el pasado. "Ya no soy la chica vulnerable que se dejaba manipular, la que estaba en Estados Unidos ya no existe.

Cuando vine al Perú, mi vida dio un giro muy bonito, tengo a mis hijos felices, sin temores ni miedos, como para que se arruine con su presencia", expresó, destacando que ha superado muchas de las dificultades que antes la mantenían atada a una vida de inseguridades.

Posibles consecuencias legales para Ítalo Villaseca

La preocupación de Greissy no solo está relacionada con la 4menaza de una posible ruptura de su tranquilidad, sino también con las repercusiones legales que Ítalo podría enfrentar si regresa a Perú.

La modelo advirtió que, si su esposo es deportado, tendría que enfrentarse a serias consecuencias legales debido a las denuncias que ella ha interpuesto en su contra. "Es lo peor que me puede pasar y si llega, no la tendrá fácil porque tiene denuncias por alimentos y violencia psicológica", sentenció Greissy, dejando claro que está dispuesta a seguir luchando por la protección de sus derechos y los de sus hijos.

Greissy Ortega no tiene intenciones de permitir que su exesposo cause más problemas en su vida ni en la de sus hijos, y ha demostrado que su prioridad es mantener su paz y estabilidad familiar, a toda costa.

Si Ítalo regresa a Perú, parece que no será un regreso fácil, ya que deberá enfrentar tanto las consecuencias de su situación legal en los Estados Unidos como los desafíos legales que Greissy ha interpuesto contra él.